El Rocío enmudece con el mes de octubre.
Y la razón, se debe a la restauración de la imagen de la Blanca Paloma.
Ahora es, el Simpecado de la hermandad Matriz el encargado de presidir el altar del Santuario.
Esta es la imagen que baña la aldea a los pies de la marisma.
La Hermandad Matriz de Almonte ha iniciado los trabajos de restauración de la Virgen del Rocío y su imagen ha sido retirada de los cultos.
Se estima que dicha acción de mejora y conservación tenga una duración de tres meses.
Tal y como ha informado la Hermandad Matriz, la decisión de la restauración se tomó después de que previamente fuera aprobada, “por unanimidad”, por los hermanos y ciudadanos de Almonte en Cabildo Extraordinario celebrado el pasado 24 de septiembre.
Así, la Matriz señaló que durante la pasada legislatura las hermanas camaristas trasladaron a la Junta de Gobierno “su preocupación” acerca de la imagen, por ello, se realizó un “profundo” estudio sobre su estado que concluyó con la recomendación de realizar una intervención de conservación.
Esta intervención será realizada por Fuensanta de la Paz Calatrava, restauradora, doctora en Bellas Artes, en la especialidad de Conservación y Restauración de obras de arte y Premio Extraordinario de Doctorado
Durante este tiempo, Nuestra Señora del Rocío permanecerá en su Santuario, pero en instalaciones especialmente acondicionadas al efecto, por lo que la Virgen será retirada del culto público para garantizar su cuidado durante este proceso de intervención.
Además, el calendario de peregrinaciones extraordinarias de las hermandades y asociaciones rocieras se mantiene tal y como estaba previsto.