La situación derivada del Coronavirus está teniendo también sus consecuencias en el sector de la industria cárnica de nuestra provincia que aunque con las puertas abiertas de sus establecimientos, dado que la elaboración de productos cárnicos se considera actividad que responde al suministro de alimentos de primera necesidad, ha visto mermadas las ventas en un 90%, no descartándose medidas drásticas laborales si perdura la situación. Así se confirma desde la Asociación que representa al sector, la de Industrias de la Carne (AICE), integrada en la FOE.
Desde la propia Asociación en contacto permanente con sus empresas miembro, ha elaborado una guía de recomendaciones para colaborar en el freno de esta pandemía. Las recomendaciones de AICE para el sector están centradas en la necesidad de extremar las medidas de protección indicada por los Ministerios de Sanidad. Además del uso de los EPIs, deben contemplarse medidas como intensificar el orden y la limpieza en el centro de trabajo, sobre todo en superficies con alto riesgo de favorecer la transmisión; usar los equipos de trabajo la persona titular del puesto; desinfección habitual de los útiles de trabajo con soluciones hidroalcohólicas; si se trabaja con moneda, usar guantes desechables; mantener la distancia de seguridad con la persona a la que se atiende y entre compañeros en la medida de lo posible; si se cuenta con comedor para trabajadores, controlar que se mantiene esas distancias establecidas; limitar las reuniones presenciales y fomentar las videoconferencias: evitar viajes a otras provincias y promover el teletrabajo cuando sea posible.
Además, desde AICE se ha conformado en el seno de la propia Asociación un Punto de información permanente donde atender todas las dudas y ofrecer la máxima información posible a sus empresas asociadas a las que se les ha pedido la máxima colaboración y visión de futuro para el mantenimiento de nuestro tejido cárnico, garantizar el futuro y conseguir salir con más fuerza de esta situación tan negativa que nos toca vivir.