El malestar por la debacle electoral en Cataluña dentro de Cs y PP no se ha hecho esperar. El hecho de pasar de 36 a 6 escaños y la pérdida de casi un millón de votos ha hecho que un sector crítico cada vez más extenso esté exigiendo ya depurar responsabilidades políticas.
Desde dicha facción se señala al vicesecretario general, Carlos Cuadrado, y su adjunto, José María Espejo-Saavedra, según coinciden diversos medios.
Sin embargo, la presidenta del partido naranja, Inés Arrimadas, ha dejado claro esta mañana en Onda Cero que ni piensa dimitir ni destituir a miembros de su ejecutiva.
Mientras tanto, la dirección nacional de Ciudadanos está convocada hoy en Madrid a las 19.00 horas para una reunión «urgente», en la que pese a la situación epidemiológica del coronavirus, se pide presencialidad.
Por su lado, en el PP la división interna se agrava tras el descalabro en el 14-F, en el que los populares han sacado los peores resultados de la historia, logrando solo tres escaños, perdiendo uno en relación a 2017.
En el partido se señala directamente al presidente nacional de los populares, Pablo Casado, como principal responsable de este descalabro, sobre todo teniendo en cuenta que él mismo se implicó muy directamente en la campaña electoral.
Este fracaso electoral podría poner en cuestión de nuevo el liderazgo de Casado en el partido, según sus críticos, que subrayan el hecho de que Vox le haya superado, de forma espectacular, en número de escasos al lograr un total de once.