El Complejo energético de Ence en Huelva desarrolla hasta finales de este mes su parada técnica anual, en la que se aplican importantes medidas para garantizar la seguridad y minimizar el riesgo de contagio frente a la Covid-19. Al habitual esfuerzo añadido realizado para garantizar la seguridad de los trabajadores en esta importante operación periódica, se añade este año un protocolo específico contra el coronavirus, que incluye medidas como la realización de test de detección para todas las personas de empresas contratadas y una exhaustiva planificación de los trabajos en sectores estancos delimitados por colores.
En concreto, se han definido hasta cinco sectores dentro de las instalaciones con colores identificativos y límites individuales de confluencia máxima de personas, que coinciden con los principales trabajos de mantenimiento y mejora planificados. Dentro de estas burbujas se ha habilitado todo lo necesario para el desarrollo de las labores, como casetas de seguridad, aprovisionamiento de equipos y zonas de aseo o descanso, para evitar la salida de los trabajadores. Sólo pueden acceder de una zona a otra un número reducido de personas con responsabilidades transversales.
Para acceder al complejo industrial, además de someterse a la prueba de detección de la Covid-19 – como ya ha hecho todo el personal de Ence que se reincorpora del teletrabajo-, las personas han tenido también que formarse y demostrar mediante un test el conocimiento del exigente protocolo implantado por la compañía frente al coronavirus. Además, se extrema la vigilancia con auditorías diarias del cumplimiento de todos los requisitos: toma de temperatura en cada acceso al complejo, observación del distanciamiento entre personas, uso permanente de mascarilla e higienización constante de las zonas de trabajo, tanto interiores como exteriores.
El objetivo es garantizar los excelentes niveles de seguridad conseguidos en los últimos años, incluyendo ahora la máxima protección frente a la pandemia para evitar cualquier riesgo de contagio. La seguridad es la máxima prioridad para la compañía.
En total, participarán en esta parada técnica casi 500 personas de Ence y de más de 50 empresas auxiliares. Se desarrollarán hasta 247 trabajos programados destinados al mantenimiento de las instalaciones, y mejoras para seguir reforzando su excelencia ambiental, así como su eficiencia y fiabilidad.