La piscina municipal de Almonte fue el lugar escogido ayer por los corresponsales juveniles de Almonte para celebrar el fin de la temporada.
El corresponsal es una figura que la concejalía de Juventud del ayuntamiento de Almonte puso en marcha hace unos meses con el fin de conseguir que jóvenes de la localidad adquirieran un compromiso social. Así, el corresponsal informa a otros jóvenes de la oferta de ocio y cultural que diseña el consistorio y, a su vez, son portavoces de las demandas de los jóvenes ante quieren toman las decisiones.
Todo ello se hace de una forma lúdica. Con la jornada de ayer, que incluía juegos acuáticos, exhibición de zumba, karaoke o merienda, se pretendía, precisamente, cumplir con una de las promesas que se les había hecho a los corresponsales.
Termina la temporada, pero se pretende ampliar la red, por lo que tanto concejalía como corresponsales se encuentran inmersos en una campaña de captación.
La intención del ayuntamiento es que la figura del corresponsal se afiance en el municipio y les sirva de intermediarios y portavoces del sector juvenil.