Lo que se desarrolla con éxito, tiene que tener un colofón a la altura. Así lo han creído oportuno en Bonares donde, por primera vez, se ha celebrado un acto para cerrar las fiestas cruceras. Tras la Misa de Simpecados, un acto que se lleva a cabo como Acción de Gracias, tuvo lugar una jornada de convivencia en la que estuvieron representadas las doce cruces.
La unión y el orgullo de ser crucero. Dos ingredientes perfectos para que estas fiestas crezcan cada año. En esta edición, la Cruz de la calle Larga ha sido la encargada de organizar el romero. Un trabajo que ha llevado a cabo de una forma, según el alcalde, “extraordinaria”.
Más de 4.000 personas han pasado por Bonares este mes para conocer sus cruces de mayo y aún queda una semana para visitarlas. Eso sí, si piensan hacerlo, pongan especial atención a la cruz de la calle El Pozo, que ya ha tomado el testigo para organizar las fiestas cruceras el próximo año.