El Festival de Teatro y Danza Castillo de Niebla ha echado este sábado el telón. Tras un mes intenso de actuaciones, el mismo autor de la obra con la que abrió ha sido la que ha puesto el cierre. ‘El avaro’, de Molière ha sido la última de las actuaciones, homenajeando así al dramaturgo francés, de cuyo nacimiento se cumplen 400 años.
Dirigida por Ricardo Iniesta, se ha servido del formato de la comedia musical, neutralizado las partes consideradas menos actuales del original, trocando en metáforas y sugerencias la impronta naturalista de la obra.
Así, los ocho actores que participan en este festín musical han recordado el lado más egoísta y miserable de la condición humana, así como los estragos que causan el dinero y el poder, el sexismo o la desigualdad de clase, que siguen vigentes en la actualidad.
De esta manera, en el año de Moliére, el Festival Castillo de Niebla no podía acabar de mejor manera, destacando una vuelta a la normalidad que ha supuesto un éxito rotundo en una edición del Festival que ha demostrado las ganas que tenía el público onubense de volver a llenar los espacios culturales.