Ayer tuvo lugar en Valencia la gala “The World´s 50 best restaurant” con una gran puesta en escena y la presencia de los mejores cocineros y sumilleres del mundo. La reconocida lista dejó latente algo que se veía venir, el imponente liderazgo de la gastronomía iberoamericana a nivel mundial. Una vez despertados de los brillos y destellos de esta gran fiesta en la que 1.040 expertos divididos entre 27 regiones de los 5 continentes, votan sin ningún criterio preestablecido más que su experiencia y gustos personales, a los mejores restaurantes del mundo, amén de otros premios más específicos como mejor sumiller, mejor pastelero o cocinero Icono entre otros, es importante resaltar dos datos, el 60% de los 10 mejores restaurantes del mundo son iberoamericanos y de los 12 reconocimientos individuales de la lista, el 50% son iberoamericanos.
Con tan solo estos dos datos podemos hacernos una idea de que tras muchos años en los que la francesa en Europa y la japonesa en Asia eran las gastronomías de referencia a nivel mundial, hoy por fin se reconoce a la gastronomía iberoamericana como líder mundial, a través de la diversidad de sus 22 países. Un movimiento de transmisión cultural que viene precedido de un gran trabajo liderado desde la gastronomía española por grandes como Ferran Adriá, Joan Roca o Andoni Luis Aduriz a este lado del atlántico y del desparpajo, tesón y valentía de un importante número de grandes profesionales de países de América latina que han sabido seguir el camino abierto por auténticos revolucionarios como el gran Gastón Acurio en Perú o Leonor Espinosa en Colombia. Profesionales que libres de complejos se han dedicado a investigar, conocer y difundir la riqueza agroalimentaria de cada uno de sus países, rescatar recetas ancestrales, revalorizar su cocina autóctona hasta llevarlas a lo más altos de escalafones como “The World´s 50 best restaurant” que tiene este año al peruano Central, de Virgilio Martínez, como mejor restaurante del mundo.
Huelva pionera, una vez más
Hay veces que puede parecer manido, pero tener el primer equipo de futbol, primer club de tenis, de golf o primera churrería de España y que pronto, seguro, seamos los primeros en lanzar un cohete al espacio desde suelo español con el Miura 1, entre otros muchos hitos, demuestra que la tierra y los onubenses tenemos algo que nos hace ser arrojados y sin duda concienzudos.
En 2021, tras una dura pandemia y en medio de cierres de fronteras, restricciones, distancias de seguridad y el pánico creado por una pandemia mundial, Huelva se convirtió en la sede de Binómico, el único congreso de gastronomía iberoamericana del mundo que se celebra de forma anual y que aúna los intereses de los 22 países Iberoamericanos. Un evento único que coloca a la ciudad, una vez más, como nexo de unión de Iberoamérica a través de su gastronomía, cultura, agroalimentación y turismo. Un ejemplo de que la colaboración privado-pública funciona y que ha conseguido en solo dos ediciones asentar la cita sumando el apoyo de todas las instituciones, desde locales a internacionales, y del sector gastronómico internacional. Un evento que ha sido capaz de traer a Huelva, en solo dos ediciones, a más del 20% de los 19 mejores restaurantes iberoamericanos del mundo a transmitir sus conocimientos y empaparse de nuestra cultura gastronómica y nuestros productos, que le ha ofrecido a la ciudad el primer y único paseo de la fama de la gastronomía iberoamericana y un amplio programa de actividades formativas y lúdicas, sin olvidarnos de la proyección internacional de la marca Huelva o de ser el primer congreso gastronómico en estar presente en la historia de FITUR con stand propio por el que este año pasaron 6 Ministros de Turismo o los Directores de algunas de las Marca País más reconocidas del mundo.
La gastronomía Iberoamericana está en auge y en los próximos años irá a más porque la fuerza de la región y la riqueza cultural y agroalimentaria de la misma no tiene fin, y Huelva una vez más supo verlo, asentarlo, vivirlo y disfrutarlo. Enhorabuena a todos los premiados y enhorabuena a Huelva, la pionera.