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Los regantes del Condado de agua subterránea se reunieron ayer en una asamblea ordinaria. Un encuentro al que asistió el que hasta ayer era subdelegado del Gobierno en funciones, así como un representante de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, entre otros. Esta comunidad fue creada en abril de 2015 como requisito para comenzar la tramitación de las concesiones de agua hasta la llegada del trasvase de 15 hm3.
El concejal del ramo del ayuntamiento de Almonte ha mostrado su confianza en que, más pronto que tarde, el sector cuente con las herramientas necesarias.
El proceso “será lento y complejo”. Eso es lo que piensan los miembros de esta comunidad. Pero mientras no llegue el trasvase de 15 hm3, el colectivo necesita el agua subterránea. Una vez que lo tengan, su compromiso es el de cerrar todos los pozos y depender solo del agua superficial.
Los alcaldes de Bonares y Rociana también estuvieron presentes en la asamblea. Ambos han asegurado estar “preocupados” porque la situación se resuelva pronto, pero seguros de que llegará.
En esta asamblea ordinaria se aprobó, entre otras cosas, el presupuesto para la campaña 2017. Además, se nombró a un responsable que se encargará de controlar las cuentas en la comunidad.
