Las mañanas de julio se viven a tope en Valverde del Camino. La escuela de verano ya se encuentra a pleno rendimiento y más de 100 niños se encuentran disfrutando del amplio abanico de actividades que esta escuela ofrece, que van desde juegos grupales, carreras hasta el momento estrella: el baño en la piscina.
Esta escuela de verano es además una muy buena alternativa para fomentar la conciliación familiar. Los pequeños no tienen colegio, pero muchos padres, siguen trabajando. Así, en compañía de otros niños y a cargo de los más de ocho monitores, las mañanas se hacen más cortas entre risas y diversión.
Una apuesta que cada año lleva a cabo el consistorio valverdeño con la que además, se fomenta que los más pequeños hagan nuevos amigos, aprendan y donde el objetivo más importante a alcanzar es la diversión.