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La Fundación Cepsa se ha volcado durante estos meses de emergencia sanitaria. Desde el inicio de la crisis por el COVID-19, esta entidad repartió a los sanitarios de la provincia de Huelva equipos de protección individual: guantes, buzos y gafas de protección total.
Asimismo, la ayuda a aquellas personas que en estos tiempos dejaron de percibir ingresos se convirtió en una necesidad imperante, para lo que esta fundación, así como trabajadores de la empresa de combustibles, han mostrado su apoyo. En total, el Banco de Alimentos de Huelva ha recibido unos 70.000 euros.
Además de la ayuda propia, la entidad no ha cesado en su actividad como esencial para la población, ya que numerosos productos en estos tiempos se convirtieron en fundamentales para la lucha contra la enfermedad, sobre todo a las familias más vulnerables.
Otra de las iniciativas tan esenciales durante este tiempo han sido los cheques combustibles. Diez mil euros para los vehículos de organizaciones de voluntarios como Protección Civil, que han realizado numerosas iniciativas en este tiempo de acción social.
La situación de emergencia no ha concluido, y la Fundación Cepsa sigue trabajando en diversos planes de actuación orientados a paliar los efectos de la crisis económica derivada de la pandemia. Se trata ‘arrimar el hombro’ como lema para esta situación que nos ha tocado vivir.
