El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas; y el Director General de Memoria Democrática de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales de la Junta de Andalucía, Luis Gabriel Naranjo, han participado esta tarde en el acto oficial de señalamiento como Lugar de Memoria la antigua Cárcel Provincial de Huelva, un edificio penitenciario de los años 30 que el régimen franquista utilizó primero como centro de represión de presos republicanos durante la Guerra Civil y la posguerra antes de proceder a su fusilamiento y más tarde (años 60) como un lúgubre espacio donde recluir y experimentar con presos internados por su condición homosexual.
Ubicada en la Avenida Alcalde Federico Molina, la cárcel de Huelva se convirtió durante el franquismo en lugar de reclusión de miles de presos republicanos. Cientos de reclusos se dejaron la vida entre sus paredes a causa del hacinamiento, las deficientes condiciones higiénico-sanitarias y la pobre alimentación que recibían. Todo tipo de infecciones y enfermedades (tifus, sarna) causaron estragos entre los internos, que sufrieron una mortalidad altísima.
A finales de los 60 y hasta 1978, la Dictadura la convirtió en centro de internamiento de homosexuales de toda España que eran castigados al amparo de la denominada Ley de Vagos y Maleantes. El franquismo la designó como establecimiento especializado en acoger lo que llamaba pervertidos sexuales, los conocidos como homosexuales genuinos o congénitos y los homosexuales de hábito. En la cárcel de Huelva se siguieron a rajatabla los consejos de los médicos Vállejo-Nájera (El gen rojo) o López Ibor y la homosexualidad era tratada como una enfermedad a extirpar, utilizándose terapias basadas en trabajos forzados, palizas, humillaciones y brutales prácticas pseudomédicas actualmente prohibidas.
El Grupo Municipal de Izquierda Unida propuso al Ayuntamiento de Huelva en 2012 que la Cárcel, el Muro del Parque Moret y la Isla Saltés fueran declarados Lugar de Memoria, una propuesta que fue rechazada por el alcalde, Pedro Rodríguez, y la mayoría absoluta del Partido Popular. Desde hoy, la antigua prisión ya cuenta con el símbolo de Lugar de Memoria por lo que los poderes públicos deberán velar por la salvaguarda, conocimiento y difusión de la historia de la lucha del pueblo andaluz por sus derechos y libertades. Y tras los muros de la antigua cárcel, miles de presos y presas republicanas de Andalucía y España sufrieron las consecuencias de la Dictadura de Franco.
El Área de Libertad de Expresión Afectivo-sexual de Izquierda Unida en Andalucía (ALEAS) ha celebrado la decisión de la Junta de señalizar este lugar con el objetivo de visibilizar y reconocer a las personas que sufrieron vejaciones y privación de libertad en esta prisión por el simple hecho de ser homosexuales o transexuales.
El Consejo de Gobierno de la Junta ha aprobado la declaración de 50 Lugares de Memoria en Andalucía. Esta figura recuerda los principales emplazamientos de la represión franquista y sirve de homenaje a las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura franquista. En Huelva están la Cárcel Provincial, las fosas comunes de La Palma y el cementerio viejo de Almonte, la Isla de Saltés, Membrillo Bajo y el muro del Parque Moret de la capital onubense.