El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento del inicio de la tramitación del proyecto de orden por la que se aprueban las bases reguladoras para la concesión de subvenciones destinadas a municipios de Andalucía para la realización de actuaciones frente al cambio climático. Estas ayudas contribuirán a la adaptación y mitigación ante los efectos climáticos, reforzando así el compromiso de la Junta de Andalucía con la sostenibilidad y la resiliencia climática en entornos urbanos y periurbanos.
Estas subvenciones, que cuentan con un presupuesto inicial de 3 millones de euros a distribuir entre los años 2025 y 2026, serán financiadas en un 85% con cargo al programa Andalucía FEDER 2021-2027. Las ayudas buscan promover la adaptación al cambio climático, la prevención del riesgo de catástrofes y el fomento de la resiliencia mediante enfoques basados en los ecosistemas, fomentando proyectos municipales que integren soluciones basadas en la naturaleza.
Las ayudas estarán destinadas a financiar proyectos que contribuyan a la lucha contra el cambio climático a través de diversas iniciativas. Éstas incluyen la creación de infraestructuras verdes y la ejecución de proyectos de repoblación, revegetación y gestión adaptativa de los espacios forestales, aplicando soluciones basadas en la naturaleza que fomenten la captura de carbono verde.
Además, se contemplan actuaciones específicas en ecosistemas litorales para incrementar la capacidad de fijación de carbono azul y fortalecer la resiliencia de estas áreas mediante prácticas sostenibles. Los proyectos sobre vertederos sellados también podrán ser subvencionados, siempre que incluyan infraestructuras verdes que mejoren la calidad ambiental.
Otra línea de actuación es la creación de bosques urbanos, concebidos para mitigar y adaptarse al cambio climático, ofreciendo un enfoque de reurbanización que integra la naturaleza y mejora el entorno urbano. Asimismo, se promoverá la renaturalización de las ciudades, lo que permitirá ofrecer servicios ecosistémicos clave como la retención de agua, la regulación del clima local, la captura de carbono, y la creación de espacios recreativos que fomenten la biodiversidad. Por último, la iniciativa también se enfocará en la renaturalización de patios de escuelas, promoviendo un entorno más saludable y sostenible para las generaciones más jóvenes y contribuyendo a la educación ambiental desde la infancia.
Estas medidas se enmarcan en un contexto en el que los impactos del cambio climático son cada vez más evidentes. De acuerdo con el sexto informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), para mediados de siglo se proyecta un aumento de la temperatura que podría oscilar entre 2 y 4,5 grados, y para finales de siglo, entre 2 y 5,5 grados. Esta tendencia, acompañada de una reducción de las precipitaciones, la menor disponibilidad de agua y una mayor frecuencia de fenómenos extremos, representa un desafío que requiere medidas inmediatas y sostenibles.
Así, las subvenciones se articulan a través de dos líneas de apoyo, diferenciadas por la población de los municipios. Por un lado, se atiende a los municipios con mayor densidad demográfica (de más de 100.000 habitantes) y, por otro, a los que tienen una población menor de esa cantidad, para que todos puedan acceder a los recursos necesarios para hacer frente a los desafíos climáticos de manera equitativa.
Este proyecto es una muestra clara del compromiso de la Junta de Andalucía con la puesta en marcha de políticas públicas que refuercen la sostenibilidad. Estas subvenciones permitirán a los municipios andaluces no sólo adaptarse a las nuevas condiciones climáticas, sino también mejorar la calidad de vida de sus habitantes mediante la creación de entornos más saludables y sostenibles.
Con estas medidas, la Junta de Andalucía refuerza su estrategia de acción local frente al cambio climático, alineándose con los principios del Plan Andaluz de Acción por el Clima (PAAC) en una clara voluntad de promover un modelo de desarrollo que no sólo responda a las necesidades actuales, sino que también garantice un futuro sostenible y resiliente para todos los andaluces. La iniciativa, además, es un recordatorio de que la acción climática comienza a nivel local y que la colaboración entre los distintos niveles de gobierno es esencial para abordar los retos que plantea el cambio climático.