La Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul planifica medidas de emergencia para contar con una red de puntos de agua para la fauna ante la ausencia
de lluvias en primavera y el incremento de las temperaturas en verano. Dichas medidas se refieren a las adecuaciones de las charcas, a la instalación de nuevos abrevaderos; así como a la recuperación de fuentes existentes.
Este plan comienza en la provincia de Jaén, donde la Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul ha proyectado la instalación de ocho abrevaderos distribuidos estratégicamente en puntos de fácil acceso que están siendo adquiridos por la delegación y que se instalarán con medios propios.
Así, en colaboración con los Agentes de Medio Ambiente y personal de la Agencia de Medio Ambiente y Aguas (AMAYA), la Dirección del Parque Natural ha realizado un estudio de los distintos puntos de agua que tradicionalmente vienen aguantando todo el verano y se han localizado 36 puntos y 7 tramos de arroyos, si bien su distribución espacial resulta ser muy irregular con zonas donde este recurso está muy bien distribuido y es muy accesible para la fauna.
Sin embargo, en una amplia zona del monte Despeñaperros y en la cuerda del Collado de la Estrella hay una menor cantidad de manantiales, por lo que los ríos y arroyos se secan en verano o se quedan reducidos a unas pocas pozas. Esta escasez de agua provoca que los animales tengan que realizar importantes desplazamientos o que se tengan que quedar en las zonas cercanas a los abrevaderos, lo que supone una presión de herbívora brutal en esas zonas.
Para tratar de corregir estas situaciones no deseadas y, sobre todo, para evitar mortandad por sed, se ha planificado introducir en esas zonas con ausencia de agua la instalación de bebederos artificiales portátiles que se abastecen con contenedores de 1000 litros de capacidad que serán rellenados periódicamente.
Asimismo, la Delegación Territorial de Jaén está realizando obras de mejora en las pocas fuentes existentes que consisten en la construcción de un sistema de pequeñas pozas sucesivas aguas abajo del manantial que permiten formar pequeñas charcas en cascada utilizando los materiales de la zona. Estas pozas permiten que tanto las aves como anfibios y mamíferos dispongan de agua limpia durante el verano.