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El delegado territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Álvaro Burgos, ha liberado un ejemplar macho de aguilucho cenizo (Cyrcus pygargus), rehabilitado en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) del Paraje Natural Marismas del Odiel. El aguilucho cenizo está catalogado como ‘vulnerable’ en el Catálogo Andaluz de Especies Amenzadas.
La suelta se ha llevado a cabo en Huelva capital, en una zona del extrarradio con cultivos de secano, donde suele anidar esta especie. El ejemplar ingresó en el CREA el pasado 31 de mayo con una fractura de coracoide. Durante los 40 días en el centro ha pasado distinta etapas hasta ejercitar la musculatura en una jaula-voladero y ser anillado para su posterior liberación a su medio natural.
El delegado territorial ha estado acompañado de técnicos de la Delegación territorial onubense, entre los que se encontraba el coordinador regional del Plan de Conservación del Aguilucho Cenizo, Miguel Garrido.
“El aguilucho cenizo es una especie que nos muestra el camino hacia el desarrollo sostenible porque es un caso paradigmático de cómo la agricultura es compatible con la conservación”, ha declarado Álvaro Burgos, quien ha agradecido a los agricultores “la importante colaboración a la hora de retrasar las cosechas lo máximo posible”.
El aguilucho cenizo construye sus nidos en la campiña, especialmente en los campos de cereales. En la provincia de Huelva, el Plan de Conservación se aplica en los municipios de Paterna del Campo, Escacena del Campo, Manzanilla, Villalba del Alcor, Niebla, Rociana del Condado, Almonte, Beas, Trigueros, San Juan del Puerto y su extensión hacia la capital.
Durante la campaña 2019, los técnicos y los agentes de medio ambiente, que forman los equipos de trabajo, han localizado hasta el momento 67 nidos en la campiña de Huelva.
Los nidos de esta especie están expuestos especialmente a depredadores alados como la cigüeña blanca, que recorre los trigales en bandadas en busca de pequeños reptiles y roedores y acaba atacando los huevos y pollos pequeños de aguilucho cenizo, así como de perdices y codornices que se encuentren en su camino.
El CREA de Marismas del Odiel, por otro lado, acogió en 2018 un total de 465 ejemplares de fauna. El 88 por ciento fue aves, el 7 mamíferos y el 4 reptiles. El balance de recuperación de animales fue de un 56,11 por ciento. Más de la mitad de los animales fueron recuperados y liberados al medio natural. El pasado año destacaron los ingresos de un buitre negro, un águila imperial, un águila pescadora y un milano real. Al margen de su función principal de recuperación, el CREA de la provincia de Huelva se erige en un centro de educación ambiental por las numerosas visitas que recibe por parte de escolares a través de distintos programas.
