La Mancomunidad de Desarrollo Condado de Huelva celebra durante este 2016 sus 25 años. Un cuarto de siglo implantada en el territorio condal como una de las principales fuerzas de desarrollo de la comarca, impulsando el crecimiento económico, social y cultural del Condado a través de una política de consenso y participación.
Una de las principales líneas estratégicas que ha seguido esta entidad durante todos estos años ha sido la de fomentar la igualdad de género y de oportunidades entre mujeres y hombres en la comarca. Para perseguir este objetivo se han llevado a cabo distintas acciones trasversales, así como otros proyectos concretos. De este modo, la Mancomunidad ha impartido módulos de sensibilización y formación en igualdad de género al alumnado de todos los cursos de Formación Profesional para el Empleo, de los Talleres de Empleo, de centros de educación reglada de distintos municipios y en sesiones grupales de personas usuarias del servicio de orientación laboral. Esto se traduce en que más de 40.000 personas de la comarca han recibido algún tipo de formación en igualdad de género por parte de la entidad.
Además, la entidad ha organizado numerosas charlas, jornadas, mesas redondas o proyectos específicos en torno a la igualdad de género, entre las que se puede destacar: Centro de Información de la Mujer (2016), Programa UNEM (2014), Proyectos de corresponsabilidad en el hogar (2012-2014), Proyectos Intégrate, Enlace y Actívate (2004-2008), Observatorio virtual de género en el mundo rural (2006-2008), Taller de intercambio cultural con mujeres inmigrantes (2006-2007), Proyecto e-Mujeres (2005-2006), Proyecto Mujeres en red (2004-2005), Proyecto Mujeres on-line (2002-2004), Proyecto DIBAE (2001-2002), Proyecto Crear su empleo (1996-1997) o Proyecto de Preformación y orientación para mujeres (1993).
Y es que el objetivo último de la Mancomunidad es mejorar la calidad de vida de los habitantes de los municipios que la conforman y ese objetivo no se entiende sin tener en cuenta la perspectiva de género en cada una de sus decisiones más allá de meras acciones puntuales con carácter finalista, sino como parte de un proceso más amplio que tenga como fin lograr un desarrollo rural igualitario, formado por etapas, que vayan contribuyendo a sentar las bases hacia la transformación de la realidad.