La Hermandad Matriz quiere desmentir los diagnósticos aventurados y precipitados que culpan a la empresa INESPASA y a todos los ingenieros encargados del proyecto de las nuevas andas procesionales de la Virgen, de lo acontecido el pasado Lunes de Pentecostés, cuando en plena procesión de la Virgen se rompió uno de los ocho bancos.
La corporación almonteña ha subrayado que la colaboración de la empresa de ingeniería, localizada en el Parque Tecnológico Aeroespacial AEROPOLIS, desde el año 2011, ha sido fundamental para poder solucionar técnicamente las distintas mejoras que se han llevado a cabo para resolver los diversos problemas que ha ido planteando la complejidad creciente de la procesión de la Santísima Virgen desde esta fecha. Y particularmente, las mejoras realizadas en el antiguo paso para la procesión de Reina por las calles de Almonte, que se produjo en mayo de 2013; entre otras actuaciones; haciéndolo siempre de forma altruista. Todo ello, le valieron en el año 2019, la concesión del título de Hermano de Honor de la Hermandad Matriz a Antonio Ramírez, uno de los propietarios de INESPASA.
Cabe señalar, que, en el actual proyecto del nuevo paso, han sido diseñadas las estructuras de palio, andas y las nuevas cogidas de los varales, por el ingeniero aeronáutico José Moreno y su equipo, mientras que la empresa sevillana, además de diseñar la peana, ha coordinado, definido y gestionado todos los trabajos necesarios para la ejecución material del proyecto al completo.
También destacar que las dos últimas procesiones con tan solo quince días de distancia temporal han servido para comprobar las fortalezas y debilidades del proyecto: la celebrada en Almonte, el pasado 22 de mayo, durante más de doce horas, y la celebrada en la aldea del Rocío, este pasado Lunes de Pentecostés; en las que se han apreciado mejoras sustanciales en su desenvolvimiento, hasta que se ha producido el referido incidente en torno a las 6:20 horas.
Subrayar que la nueva estructura diseñada y desarrollada para el palio de la Santísima Virgen en fibra de carbono, ha reducido su peso casi a la mitad y ha tenido un comportamiento muy óptimo en ambas procesiones. En todos estos trabajos realizados se ha buscado un punto de equilibrio entre hacer un paso lo suficientemente ligero para que no se caiga y mejorar, al mismo tiempo, tanto la seguridad de la Imagen, como premisa primordial, como la de las personas que la portan, los almonteños. En este empeño es en el que se seguimos trabajando. De hecho, tras el incidente, las nuevas andas con un banco menos fueron portadas casi doscientos metros sin tocar el suelo.
En este punto, y aunque ya se han iniciado las investigaciones para determinar las causas técnicas que han producido la rotura del banco, aún no hay conclusiones sobre lo ocurrido, estando previsto que el paso se lleve de nuevo a INESPASA para realizar un estudio más exhaustivo, en los próximos días, siguiendo el protocolo de actuaciones habitual que se hace tras la finalización de una procesión de la Virgen; verificando su estado y, en este caso, para diagnosticar lo ocurrido.
Es por ello, que las conclusiones que algunos han aventurado ya, están fuera de lugar; siendo, como ya manifestó el Presidente, la voluntad de su Junta de Gobierno, de buscar, una vez que se tenga el resultado del diagnóstico, las soluciones más adecuadas para rematar un proyecto que sólo ha podido probarse y verificarse en vivo, pero que ha manifestado indudables fortalezas que nos auguran un futuro esperanzador para la procesión de la Santísima Virgen del Rocío, de cara a la Romería de 2023.
Aprovechamos para agradecer el esfuerzo realizado por todo el equipo de ingenieros a lo largo de estos tres años y manifestamos nuestro reconocimiento por la dedicación y entrega demostrada.