Como ya es tradición al llegar el verano, a sones de tamboril, Chucena celebra la “Pará Rociera” infantil, una bonita manera de recrear el tradicional camino del Simpecado chucenero hasta la aldea, pero siendo lo más pequeños sus protagonistas.
Organizada por el grupo joven, el Simpecado junto a su Hermano Mayor infantil y más hermanos, recorren las principales calles del municipio, finalizando en la Casa Hermandad y dando comienzo a una convivencia entre los pequeños y sus familias.
La semilla rociera en Chucena está más que asegurada, siendo esta una bonita manera de fomentar la devoción a la Blanca Paloma desde la cuna, inculcando el sentimiento de Hermandad entre los más jóvenes.