La Plaza Virgen del Rocío, ubicada en pleno centro deAlmonte, ya cuenta con el extraordinario atractivo de la catedral góticainstalada por el Ayuntamiento para recibir a la Patrona en su Venida del 19 al20 de agosto. El domingo se completó la obra con el estreno de la iluminación.A la conclusión del primero de los rosarios públicos programados por laHermandad Matriz, tuvo lugar el acto de encendido ante un numeroso público quecontempló la belleza de la construcción realizada en su mayor parte en maderaforrada con papel de seda blanco rizado. El toque de las campanas de la Parroquia de la Asunción y la interpretación de la salve por parte de la bandamunicipal de música pusieron el complemento sonoro a este momento de granimportancia en los preparativos que se están haciendo de cara al Traslado quese produce cada siete años.
En el acto, estuvieron presentes el alcalde, José Antonio Domínguez Iglesias (PP) junto a concejales de la corporación; el presidente dela Hermandad Matriz, Juan Ignacio Reales, y el párroco, José García. Tambiéndebe destacarse la presencia del cronista de la Villa para el Traslado y lapróxima Romería, el conocido periodista Antonio García Barbeito. El primer edilensalzó la ilusión presente en el pueblo, ‘expresada en el embellecimiento deque son objeto las calles de la localidad con motivo de la Venida de la Virgen,en un trabajo que se realiza durante meses y que ahora servirá para el disfrutede los vecinos y de los miles de visitantes que pasarán por el municipio a partirde este día, y a los que dirigimos nuestra invitación’. Por ello, agradeciópúblicamente la labor de las decenas de mujeres que han hecho posible esta obraartesanal, y a los trabajadores del departamento de Obras y Servicios por suesfuerzo para este estreno, adelantado en más de una semana con respecto alefectuado hace siete años. ‘Especialmente, a Juan María Hernández Acosta porasumir la dirección artística del montaje. Todo queda ya a la espera de lallegada de la Reina de las Marismas’, destacó.
En una segunda parte de su exposición, José Antonio Domínguez Iglesias ensalzó la figura de Juan Antonio Acosta Báñez, diseñador deesta catedral y ‘principal culpable del orgullo que todo almonteño destila alcontemplar esta obra maestra, realizada por un auténtico genio que hoy sonreirádesde un lugar más alto que estas cúpulas, viendo su construcción levantada denuevo’. Este autor, que dedicó a su pueblo y a su Virgen un importante legadoartístico, fue objeto de un reconocimiento a título póstumo bajo la cúpulacentral de la construcción recién encendida. Para ello, el alcalde entregó undocumento conmemorativo a su familia, correspondido por el aplauso de losasistentes. Su sobrina, Rocío Acosta, agradeció el respaldo público otorgadopor el Ayuntamiento y los vecinos a su obra. ‘Para nosotros, es un orgullo quela catedral diseñada por mi tío pase a ser eterna en el corazón de los almonteños’, comentó.
La catedral gótica instalada en el paseo central deAlmonte tiene unas dimensiones de 60 metros de largo por 7,5 de ancho,ampliados a 10,5 en las dos portadas exteriores. Estrenada para la Venida de laVirgen de 2005, alcanza una altura de 19 metros y cuenta con centenares depiezas forradas durante más de tres meses en dependencias municipales. Inspiradaen las catedrales europeas, dispone de una gran cúpula central y naveslaterales. Destaca por el uso de vidrieras y columnas lisas hasta una altura detres metros y medio, con el fin de evitar incendios. Como novedad con respectoal anterior Traslado, incorpora luces de bajo consumo para ahorrar energía ydisminuir el riesgo de calentamiento de la instalación eléctrica. La maestríade Juan Antonio Acosta ha pasado a manos de su sobrino, Juan María HernándezAcosta, responsable de la coordinación de los trabajos en esta ocasión.