La sociedad del Aeropuerto Cristóbal Colón comenzará el año 2015 con un punto de inflexión desde su constitución en 2004: la apertura a la participación mayoritaria de la inversión privada en un Consejo de Administración hasta ahora integrado por la Diputación y la Cámara de Comercio de Huelva, promotoras del proyecto.
Así lo ha explicado el presidente de la institución provincial, Ignacio Caraballo, quien ha señalado que tras un largo proceso “lleno de obstáculos o de exceso de celo por parte del Ministerio”, la elaboración de un Plan General y la obtención de la Declaración de Interés General de un aeropuerto en Huelva, el trabajo de la Diputación “ha finalizado”. Con la retirada de la Diputación a un segundo plano se inicia ahora “una etapa clave”, con la aprobación por parte de la sociedad de una ampliación de capital de 500.000 euros (un total de 103 acciones) a disposición de socios privados, que pasarán a conformar la mayor parte del Consejo de Administración.
Los nuevos accionistas -según se ha informado hay varias empresas y fondos interesados- sumarían así el 50,78% de la sociedad (6 representantes en el Consejo), la Diputación un 46,86% (con 4 representantes) y la Cámara de Comercio un 2,42% (un representante). No obstante Caraballo ha asegurado que la Diputación va a garantizar que este proyecto salga adelante desde la propia sociedad, en la que mantiene derechos fundacionales, como la modificación de Estatutos.
El otro punto aprobado por la Sociedad del Aeropuerto es nombrar al presidente de la Cámara de Comercio, Antonio Ponce, vicepresidente ejecutivo de la misma. Una decisión estratégica, ya que será quien coordine los contactos con los distintos empresarios interesados en invertir en el futuro aeropuerto. Para Antonio Ponce hoy es un “día de alegría” para el empresariado, ya que “gracias a la decisión de la Diputación de retirarse pasamos a tener un proyecto netamente empresarial”, mostrándose confiado en que “en coordinación con el Puerto será un éxito garantizado”.
En este sentido Ponce ha apuntado que el futuro aeropuerto “acorde con las necesidades de Huelva” permitiría que la provincia fuera un destino final de pasajeros por barco, como en Málaga, de manera que los viajeros irían del barco al aeropuerto para ir a su destino de origen y a la inversa.
Tanto Caraballo como Ponce han destacado que el cambio de rumbo del proyecto aeroportuario será muy bien acogido por los empresarios, especialmente los del sector turístico, que ven en esta infraestructura “una oportunidad y una salvación para el futuro”.
Tras la publicación del procedimiento público de la ampliación de capital el nuevo Consejo de Administración, que dota al proyecto de un carácter privado, podría constituirse en el plazo de unos dos meses.
La Sociedad del Aeropuerto Cristóbal Colón se constituyó en el año 2004 con un capital social de 480.000 euros, del que un 95 por ciento correspondiente a la Diputación y un 5 por ciento a la Cámara de Comercio, con 5 y un representantes, respectivamente, en el Consejo de Administración.