La Virgen de la Cinta ha sido la protagonista en este primer tramo del mes de septiembre. La ofrenda floral, la bajada desde el Santuario y el posterior traslado hasta la Mayor de San Pedro han reunido a miles de onubenses en torno a la devoción cintera. Todos estos actos han podido vivirlos en directo desde esta casa.
Septiembre, mes mariano por excelencia. Y en Huelva, como no puede ser de otra manera, la Virgen de la Cinta ha sido protagonista en estos primeros días del mes.
Todo comenzaba el pasado sábado día 6 de septiembre con la tradicional ofrenda floral. El Santuario recibía un gran trasiego de onubenses y cinteros que ofrecieron a su Madre de la Cinta sus mejores deseos a través de flores que iban llenando el presbiterio del Santuario.
No faltaron los rezos y los cantes en honor a la patrona de Huelva.
Todo continuó con la bajada de la Virgen Chiquita el pasado lunes 8 de septiembre, coincidiendo con la celebración de la Natividad de la Virgen María. Era imposible tener una jornada más mariana. Huelva, la Cinta y 8 de septiembre. Se reunieron todos los alicientes para que la ciudad, una vez más, arropara con fervor a su patrona.
Con la luna llena por testigo, Cinta y Huelva se reencontraron.
Su estancia en la Santa Iglesia Catedral de Huelva se prolongó hasta las 21:00 horas, tras la celebración de la Función Principal. De nuevo, Huelva respondía a llamada de su Madre en el traslado extraordinario hasta la Parroquia Mayor de San Pedro, donde aguardará la espera con motivo de la Magna Mariana.