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La consejera de Pesca, Carmen Crespo, se muestra “relativamente satisfecha” con la mejora, respecto a la propuesta inicial, de las cuotas de capturas reflejada en el acuerdo del Consejo de Ministros de Pesca de la Unión Europea.
Aunque valora “el aumento de las posibilidades de pesca para 2020 para especies importantes para Andalucía” como caballa, la bacaladilla, el jurel y el gallo, los recortes en “especies vitales” para la flota de arrastre del Golfo de Cádiz ponen en riesgo la viabilidad económica de cerca de 125 barcos y 800 tripulantes y empleados.
El acuerdo de la Unión Europea afecta a la flota andaluza de forma restrictiva en la pesca de lenguado, que baja un 20% respecto a 2019; la merluza, que decrece finalmente en un 5,47%; la cigala, que lo hace un 3,74%; y el rape, que baja un 3,43%.
Crespo admite que la negociación ha permitido “amortiguar” la propuesta inicial, que contemplaba disminuciones “inasumibles”.
Inicialmente se planteaban unos Topes Admisibles de Capturas que implicaban una reducción del 20% en merluza, del 35% en cigala, del 50% en jurel, del 40% en lenguado y del 3,5% en rape.
