Las incidencias sobre el suministro eléctrico que han afectado a más de 1.000 clientes durante 30 minutos, o al menos a 10.000 clientes con independencia de su duración, se han reducido un 42% respecto al pasado verano a pesar de las altas temperaturas registradas en Andalucía en los meses estivales, que han provocado que se haya registrado un nuevo récord de demanda máxima horaria de energía de los últimos diez años.
Así, frente a los 147 cortes de suministro de estas características del verano de 2021, durante el periodo estival de 2022 se han contabilizado 85 incidencias, que son las que registra la Agencia Andaluza de la Energía a través del Centro de Evaluación y Seguimiento Energético de Andalucía (CESEA), encargado de la evaluación y seguimiento del plan de garantía de suministro eléctrico que se activa en época estival e invernal, donde se examina que las infraestructuras eléctricas permitan atender la demanda prevista.
Así lo ha explicado el consejero de Política Industrial y Energía, Jorge Paradela, en el Pleno del Parlamento andaluz en el que ha hecho balance de este plan y ha destacado que las sucesivas olas de calor del pasado verano han tenido su traducción en un repunte de la demanda eléctrica por el uso de los sistemas de climatización en hogares, empresas e industrias, lo que ha propiciado que se haya pulverizado hasta en tres ocasiones el máximo de consumo eléctrico superando el récord histórico previo que se remontaba a 2010.
El mayor pico se registró el 25 de julio, entre las 14 y 15 horas, cuando se consumieron 7.717 MWh (megavatios hora), un 5% más que el día 11 de agosto de 2010 a esa misma hora, fecha en la que, hasta el momento, estaba registrado el récord, con 7.360 MWh. De igual modo, durante el 12 de julio (7.369 MWh) y el 22 de julio (7.502) las demandas también fueron superiores a las de hace 10 años (en un 0,1% y un 1,9%, respectivamente).
Esto ha supuesto que se rebasaran en un 8% las previsiones iniciales de demanda recogidas en este plan que se activa en los meses de verano e invierno con carácter preventivo para minimizar el impacto de posibles incidencias derivados del aumento de la demanda de electricidad, y que debe ser ejecutado por la distribuidora de electricidad “E-Distribución Redes Digitales S.L.U” (antigua ENDESA Distribución), que cuenta con el mayor número de clientes en Andalucía.
En este sentido, Paradela ha recalcado que este balance ha sido posible “gracias a las labores de prevención, seguimiento, supervisión y control que venimos desarrollando desde la Consejería sobre la calidad del suministro eléctrico y la seguridad de las instalaciones, que están garantizadas en Andalucía”.
Al hilo, ha abundado en las distintas líneas de actuación que tiene en marcha el Gobierno andaluz “para garantizar el adecuado suministro eléctrico a la ciudadanía e identificar cualquier deficiencia que pudiera afectar a la calidad del mismo”. Se ha referido así a las medidas de carácter preventivo encaminadas a supervisar las actuaciones e inversiones que las empresas distribuidoras de electricidad están obligadas a realizar para mejorar la red. En la actualidad la Consejería supervisa 71 planes de inversión en Andalucía.
Del mismo modo, a través de CESEA se realiza un seguimiento diario del funcionamiento del sistema eléctrico andaluz, lo que permite anticipar riesgos y detectar necesidades futuras para garantizar la calidad del suministro. Igualmente, el Ejecutivo andaluz acomete actuaciones específicas entre las que destacan los planes de emergencia para Andalucía. Se trata de una estrategia para que la principal distribuidora minimice el posible impacto de los incidentes en el suministro en las épocas del año con más demanda.