Niebla cuenta los días para volver a vivir su ansiada romería. Después de tres años, tras suspenderse de forma obligatoria en los dos últimos por causa de la pandemia de coronavirus, la pedanía de Lavapiés y la ermita de la patrona iliplense, la Virgen del Pino, se preparan para recibir a los romeros que, en el último fin de semana de mayo, convivirán entre cantes, bailes y buen ambiente.
No es para menos, ya que se trata de una cita festiva muy esperada por los iliplenses, que acuden en gran mayoría a venerar y disfrutar con su patrona, y cuánto más este año después de esta espera que se ha alargado más de lo normal.En cuanto a los actos previstos, el viernes 27 será la salida de los caballos, carretas y tractores haciendo el camino hacia la ermita, situada a unos 6 kilómetros del pueblo. Ahí empieza el ambiente en los chozos preparados donde cada reunión prepara las típicas tapas y bebidas mientras se canta y se baila.
Por su parte, el sábado 28 por la noche se celebrará el rosario y, el domingo 30, tendrá lugar la misa por la mañana, siendo el regreso por la tarde hacia el pueblo donde, al llegar, es el cambio de Hermano Mayor.Momentos especiales que, volverán a vivir y quedarán para el recuerdo de los iliplenses en una romería en la que vuelven los encuentros y los abrazos, bajo el manto de la Virgen del Pino.