En su estrategia de acercamiento a Pedro Sánchez, Susana Díaz quiere matar el ‘susanismo’ pero se olvida que el ‘susanismo’ es ella. Por eso Mario Jiménez ha sido el primer sacrificado como portavoz parlamentario. Así lo ven militantes del PSOE de Huelva que siguen sin entender la “deslealtad” de la secretaria general con el hasta ahora portavoz socialista en el Parlamento andaluz.
“Se equivoca Susana y Mario no se merecía este trato” insisten quienes aseguran que, precisamente, el político moguereño fue quién más hizo por que hubiese entendimiento entre Ferraz y la expresidenta de la Junta.
Es más, según estas fuentes, el hasta ahora portavoz socialista en la Cámara autonómica fue quien logró acuerdo, consenso, entre sanchistas y susanistas para la confección de listas en las pasadas elecciones generales.
De ahí que la destitución de Jiménez se deba no solo al deseo de supervivencia política de Díaz sino también a los celos políticos que ella sentiría hacia el político onubense.
En la militancia socialista se teme que Jiménez no será el único en caer y algunos vuelven a utilizar la palabra “traición” para calificar lo que está sucediendo. Como antes ya pasó -recuerdan- con Manuel Chaves y José Antonio Griñán, de los que la líder socialista se distanció cuando vio que la situación de ambos podía perjudicarle políticamente.
Díaz ha cesado este lunes a Jiménez y en su lugar ha nombrado al exconsejero José Fiscal, un nombramiento que, según la información oficial, se ha producido por unanimidad y, además, sin ninguna intervención por parte de los asistentes.
Según cuenta ABC, el secretario de Organización Juan Cornejo, visiblemente incómodo, ha sido el encargado de comunicar estos cambios tanto en el seno de la Ejecutiva Regional como ante los medios de comunicación.
Es más, dicho diario añade que el representante socialista no ha sido capaz de explicar los motivos de la salida de Jiménez y se ha limitado a hablar de renovación y cambio: “un impulso en la nueva tarea del grupo parlamentario”, al tiempo que ha insistido varias veces en que es “su amigo”.
A pesar de ser miembro nato del mismo como portavoz, Jiménez ya no asistió ayer al comité, en el que se abordó la reestructuración de la dirección del grupo parlamentario.