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La tercera edición del Nuebo Festival de Bonares ha llenado de encuentros y galas del 3 al 6 de diciembre coincidiendo con el fin de semana y la primera parte del puente. Esta edición es la más extensa hasta ahora, con 12 días de reencuentros con el escenario y el arte de nueva creación tras que en 2020 no pudiese llevarse a cabo este moderno festival debido a la pandemia.
Nuebo supone un festival inédito, irrepetible y con proyección internacional, algo que para el municipio de Bonares es una gran satisfacción. Desde la concejalía de cultura se tienen expectativas muy positivas, añadiendo que la cobertura de medios de comunicación es cada vez más amplia, incluyendo publicaciones culturales. Se trata de poner los cinco sentidos del público a disposición de la música.
Por el escenario del Teatro Cine Colón han pasado el clarinetista Camilo Irizo, Ricard Capellino y Ausiàs Garrigós. También la Banda de Música local que es la joya musical del municipio, y por ello, también ha estado presente estos días en las galas, en concreto en la noche del lunes 6 de diciembre, con un encuentro sinfónico bajo el título ‘Azules’, estrenando dos obras del compositor gaditano Carlos Guillén con pasodobles sinfónicos.
Las nuevas generaciones de músicos también han tenido su protagonismo en Nuebo Festival. Niños y niñas de entre 4 y 17 años pertenecientes a la escuela de música han trabajado durante una semana en la improvisación y música de cámara a través de nueva creación. Este trabajo donde se reanimó y activó la creatividad, se plasmó en la gala Bo’Crea del viernes 3 de diciembre contando con ruidos y silencios como parte de la música.
