Las últimas operaciones contra el crimen organizado en las costas entre la provincia de Huelva y el Algarve portugués ponen de manifiesto que los ‘narcos’ siguen sin respetar el confinamiento.
Eso lo saben las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que siguen ‘blindando’ las zonas que, hasta ahora, se consideran ‘coladeros’ para el hachís que proviene desde Marruecos.
En cualquier caso, esta actividad ilícita ha descendido de forma considerable en los últimos meses a causa de la crisis del Covid-19 y las restricciones de movilidad que conlleva en diversos países.
Aún así, los servicios de información han podido constatar que el comercio ilegal de drogas a gran escala no solo no se ha detenido sino que seguirá en pie.
No obstante, desde que se inició la pandemia se han incautado varios miles de kilos de sustancias estupefacientes (tanto hachís como cocaína) en las costas españolas y a consecuencia de ello se han detenido a decenas de personas.
La última aprehensión de hachís se registró la pasada semana en La Antilla, donde efectivos de la Policía Local hallaron fardos que pesaron unos 2.200 kilos de hachís ocultos en un chalé abandonado.
En los últimos días también desembarcó una ‘narcolancha’ en una playa de Isla Cristina con tres personas a bordo que, tras llegar a la orilla, huyeron a pie y se perdieron entre las dunas.