En Villalba del Alcor existe una gran devoción a la Virgen del Carmen. Alentada a lo largo de los siglos por frailes y monjas carmelitas, aunque ya sólo queden en el municipio estas últimas, hoy en día permanece un fuerte arraigo entre la población.
Aunque, por concesión, las fiestas en honor a la Virgen del Monte Carmelo no se celebran en la localidad hasta finales de agosto, el 16 de julio es una fecha clave para los devotos, que se concentran en el Altillo, enclave donde se situaba el convento de frailes, para rezar juntos, de una forma íntima, el santo rosario.
Normalmente, esta fecha supone la antesala de unos grandes festejos que va acompañada de verbenas y otras actividades. Este año, en señal de respeto por causas mayores, no ha sido así, pero quizá ha servido para unir más a devotos y vecinos, y hacerles, de esta forma, llegar una oración a la Virgen.
Un rezo que no es exclusivo. Pues cada mes se repite, para, de alguna forma, mantener viva esta llama de la devoción carmelita en esta localidad.