El Ayuntamiento de Manzanilla sigue inmerso en su plan de remodelación del Parque Municipal Manuel Pérez Coronado. Las primeras mejoras han sido la plantación de césped y la colocación de una rocalla y de palmeras además de nuevas fuentes.
Por otro lado, se han eliminado las piedras de la zona de juego, que suponían un grave peligro para los pequeños y que era una de las grandes demandas respecto a este espacio.
Además, el parque contará con arriates adornados mediante plantas ofrecidas por la Diputación Provincial, y el estanque se ha renovado por completo, que se adornará con una pajarera. El consistorio prevé que a mediados de junio esté concluida la ejecución, con un presupuesto no definido, ya que se trata de pequeñas obras realizadas por trabajadores municipales.
Con esta reforma, el equipo de Gobierno manzanillero consigue cumplir con uno de sus principales propósitos en cuanto a urbanismo se refiere, que era dotar de mayor vida y seguridad a este espacio verde dentro de la localidad.