El sector provincial de Sanidad del sindicato CSIF asegura que existe un “alarmante” dato de horas de descanso debidas al personal del hospital Juan Ramón Jiménez a consecuencia de la “continua negación de los días de libre disposición” que les pertenecen a los trabajadores. Los últimos datos recabados por la central sindical cifran en 1.037 las horas que la dirección del hospital le debe a la plantilla de la Unidad de Quirófanos de Urgencias y en más de 20.000 las que se adeudan en Enfermería. Un total que supera las 21.000 horas.
César Cercadillo, responsable provincial de Sanidad de CSIF, ha afirmado que “la dirección de forma ilegal, y obviando el tiempo reglamentado para su disfrute, no les permite a los trabajadores acceder a sus permisos porque no hay suficiente plantilla para suplirlos y asegurar el funcionamiento, en este caso, de los Quirófanos de Urgencias y de Enfermería. Unas unidades que ya de por sí tienen bastantes dificultades para atender a los pacientes en su día a día”.
Estas cifras, a juicio de la central sindical, son consecuencia de la “sangría de personal en el Complejo Hospitalario que en muchos momentos deja los servicios por debajo de los mínimos establecidos en una huelga”. Una situación que CSIF lleva años denunciando y que “ha ido en aumento desde que la dirección encabezada por Rafael Vargas se hizo cargo del hospital y comenzó el proceso de fusión en el que priman los números y no lo que ocurre en los hospitales y la calidad de la atención al paciente”.
Celadores, administrativos, pinches de cocina, lavandería y mantenimiento también se están viendo afectados por la escasez de personal ya que “llevan un gran peso sobre sus espaldas para garantizar el buen funcionamiento de las dependencias de los centros hospitalarios y tienen que doblar turnos para cubrir los servicios”, ha lamentado César Cercadillo.
Además se están haciendo recortes en la contratación de profesionales médicos “cuando se hacen son contratos basura de un mes o de nocheros”, ha dicho el responsable de CSIF. En muchas especialidades existe tal deficiencia que se incrementa por tres las listas de espera y en muchas ocasiones se han tenido que suspender intervenciones quirúrgicas por la falta de personal.
Por todo ello, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios agradece “la labor, la dedicación y el esfuerzo de los trabajadores que son los que están sacando adelante los hospitales a costa de no tener descansos, no poder disfrutar de sus días de permiso o doblar turnos”. Frente a esto, “nos encontramos un equipo directivo incompetente e irresponsable que sólo es capaz de preocuparse por sus números y sus objetivos y no por la atención al paciente y la salud laboral de la plantilla”.
Crítica al SAS
Por otra parte, tras las declaraciones de la Administración ante las denuncias de CSIF sobre los problemas en la sanidad pública onubense, el sindicato lamenta que el “SAS dedique más tiempo a limpiar su imagen que a trabajar para mejorar la atención al paciente y las condiciones laborales de los trabajadores”. Desde la organización aseguran que “cuando salimos públicamente a denunciar una situación es porque tenemos datos y hemos contrastado la información y todo aquello ha salido en los medios es totalmente cierto, incluso basándonos en las cifras que ofrece la propia Administración”.
El SAS únicamente sale al paso “asegurando que la prestación sanitaria está garantizada pero no rebate nuestros argumentos ni ofrece datos distintos porque sencillamente no existen. Sabe que no hay hechos objetivos que demuestren que la información que publica CSIF no es cierta, por lo que únicamente se dedica a desprestigiarnos y a lanzar campanas al viento”. Desde el sindicato se insta a la Administración a preguntar a pacientes, usuarios y profesionales para que “de una vez por todas se dé cuenta y sepa que son una realidad los largos tiempos de espera, las demoras en la realización de pruebas, la falta de trabajadores, la suspensión de operaciones o las decenas de enfermos que esperan en camas en los pasillos”. “Cada vez que salimos a denunciar, el SAS hace una declaración de intenciones y tacha de incierta nuestra información, pero nunca sale ofreciendo datos ni rebatiéndolos de forma objetiva porque, simplemente, sabe que todo responde a la verdad”, sentencia CSIF.