Las delegaciones territoriales de Igualdad, Salud y Políticas So-ciales y de Educación han organizado hoy, en el Instituto de Educa-ción Secundaria (IES) Alto Conquero de la capital onubense, una sesión de formación masiva en reanimación cardiopulmonar (RCP) con motivo de la celebración del Día Europeo de la Parada Cardiaca.
Coordinada por la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias 061, la actividad ha contando con la asistencia del delegado territo-rial del ramo, Rafael López, en compañía del director en Huelva del servicio de emergencias sanitarias, Juan Chaves.
Durante la jornada, un millar de alumnos tanto de institutos como de colegios de Huelva han sido entrenados en técnicas de RCP por profesionales del 061, Servicio Andaluz de Salud (SAS), Cruz Roja, Protección Civil, Bomberos del Ayuntamiento de Huelva y de la Facultad de Enfermería. Los participantes son alumnos de los siguientes centros educativos: Alto Conquero, La Marisma, León Ortega, Santo Ángel, La Rábida, SAFA FUNCADIA, Pintor Pedro Gómez y Rafael Reyes.
A través de esta iniciativa, la Consejería de Salud persigue au-mentar el número de personas que conozcan cómo actuar ante estas situaciones y poner en marcha la denominada ‘cadena de supervi-vencia’ en el menor tiempo posible.
Se trata del tercer año consecutivo en que se llevan a cabo en la capital estas jornadas de formación masiva, que se encuentran enmar-cadas dentro de los actos de celebración del Día Europeo de la Parada Cardiaca, una efeméride creada a propuesta del Consejo Europeo de Resucitación, que ha calculado que más de 100.000 personas al año podrían salvar sus vidas en Europa si se alcanzaran las tasas de formación de ciudadanos en estas técnicas que tienen en países refe-rentes como Países Bajos o Suecia.
La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias ha formado desde entonces a 2.050 onubenses, entre primeros intervinientes en las situaciones de emergencias y alumnos y profesionales de la comunidad educativa. Las recomendaciones internacionales indican que una de las estrategias para disminuir la mortalidad de los pacientes que han sufrido una parada cardiorrespiratoria es enseñar a la población en general las medidas básicas que deben aplicar a estos pacientes mientras llegan los equipos sanitarios, y que han demostrado que aumentan la supervivencia en estos casos.
Distintivo especial a primer interviniente
Como ejemplo de ello, la Empresa Pública de Emergencias Sani-tarias ha distinguido de forma especial en Huelva con motivo del Día Europeo de la Parada Cardiaca a Carlos Lamorena García, técnico de emergencias sanitarias natural de Ayamonte, que actualmente desa-rrolla su labor en Sevilla tras haberlo hecho en Cartaya y Punta Umbría.
Lamorena se encontraba almorzando con su familia en Isla Cristina cuando observó a un hombre de mediana edad que perdió el conocimiento. Intervino de inmediato y aplicó las técnicas de soporte vital básico hasta la llegada del equipo de urgencias de Isla Cristina y del equipo del 061, salvando así la vida de la persona afectada.
RCP Telefónica
Desde los centros coordinadores del 061, ante una situación de sospecha de parada cardiorrespiratoria, se anima y se explica a los alertantes la manera de realizar estas maniobras básicas mientras que llegan los equipos de emergencias al lugar del suceso, dado que está demostrado que intentar aplicar estas técnicas a pesar de no tener conocimientos previos en primeros auxilios ayuda a muchos de los afectados, llegando a aumentar las posibilidades de supervivencia en más del 50% de los casos.
Estos eventos suceden en la calle, en el trabajo o mientras se hace ejercicio o una actividad extenuante, si bien en su mayoría ocurren en el hogar. En la actualidad, menos de 1 de cada 10 personas sobre-viven. Las investigaciones realizadas determinan que la aplicación de las técnicas de reanimación cardiopulmonar por una persona que presencia la parada cardiaca aumenta la supervivencia entre 2 y 3 casos de cada 10, aunque sólo 1 de cada 5 pacientes llega a recibir esta ayuda.
En Andalucía, un 57% de las personas que han alertado a los servicios de emergencias sanitarias del 061 tras presenciar una parada cardiaca han podido iniciar maniobras de reanimación cardio-pulmonar básicas antes de la llegada de los equipos sanitarios. La puesta en marcha en 2012 de la denominada ‘RCP telefónica’, acti-vada en unas 43 ocasiones en Huelva, ha permitiendo que en el 82,7% de las ocasiones en las que ha sido posible aplicar este procedimiento, los alertantes han iniciado maniobras de reanimación, como la ventilación boca a boca y las compresiones cardiacas externas.
Técnica de reanimación cardiopulmonar
La parada cardiorrespiratoria es la interrupción brusca, gene-ralmente inesperada y potencialmente reversible de la respiración y la circulación espontáneas. Una recuperación del paciente sin secuelas neurológicas exige que los tiempos de actuación sean lo más precoces posibles. En este punto, la colaboración ciudadana, el aviso y el inicio inmediatos de maniobras de reanimación son imprescindibles para conseguir un buen resultado final.
La técnica de reanimación cardiopulmonar consiste en el man-tenimiento de la vía aérea abierta, de la respiración y de la circula-ción de la sangre, sin equipo específico, sólo utilizando las manos y la boca, pudiéndose usar dispositivos de barrera para la vía aérea, evitando así el contacto directo con la víctima.
Cadena de supervivencia
Durante las sesiones formativas, los asistentes pondrán en prácti-ca los consejos y recomendaciones de los profesionales sanitarios para realizar la reanimación cardiopulmonar sobre maniquíes o pacientes simulados, al tiempo que aprenderán la secuencia de actuaciones que determinan un aumento de la supervivencia tras sufrir una parada cardiorrespiratoria (PCR), lo que se ha llamado la cadena de super-vivencia.
Esta cadena consta de cuatro eslabones bien diferenciados y todos a su vez imprescindibles. En primer lugar, hay que alertar con rapidez al servicio de emergencias sanitarias llamando al número 061, para posteriormente comenzar con las maniobras de reanimación cardiopulmonar básica de forma eficaz y hasta que llegue el equipo sanitario que atenderá al paciente. En tercer lugar se efectuará la desfibrilación precoz, que se refiere al tratamiento eléctrico de la arritmia que ha producido la parada. Y, por último, el equipo de emergencias sanitarias realizará la asistencia y traslado al hospital.