NOTICIAS
10
Sep
2018

Sin duda, la Virgen del Rocío no es obra humana

| Almonte | 12:13 pm

Vestida como hace 100 años, con el traje de los duques de Montpensier, y cuando aún faltaban 15 minutos para las doce de la noche, la Virgen del Rocío comenzaba su procesión extraordinaria con motivo del centenario de la Coronación Canónica. Justo cuando se daba la bendición en el rosario que la hermandad Matriz había organizado en el Real, los almonteños saltaban la reja para encontrarse frente a frente con la dueña de sus almas.

Desde el Santuario, hasta el velario y, desde ahí, el recorrido oficial. La Virgen del Rocío se paseaba por las principales calles de la aldea, las habituales en su recorrido de romería, que, adornadas con luces, la esperaban para celebrar tan magna eferméride.

Villamanrique, Coria del Río, La Palma del Condado, Rociana o Huelva fueron algunos de los puntos por los que pasó la patrona de Almonte en la primera parte de su procesión. Fueron momentos emocionantes, sobre todo en el Real. Desde ahí, a la calle de la Romería y al Eucaliptal, y luego a la calle Almonte, donde pasó varias horas, entre el cariño de todo su pueblo, que allí, le cantó más que nunca.

Tocaba ahora pasar por calle Moguer. Como siempre, repleta de gente y con lo especial que tiene este punto por ser de los últimos antes de llegar al Santuario. Pero, en esta ocasión, los almonteños tenían algo especial preparado. La Virgen volvería al Real antes de recogerse, al lugar, donde hace cien años, el cardenal Almaraz, coronaba canónicamente a una de las devociones más universales que existe. Comenzaba entonces a brotar los primeros rallos de luz y con ellos, la Blanca Paloma regresaba a su casa. Hasta el año que viene, de nuevo en romería, para volver a regar de devoción todos los corazones rocieros.

Deja una respuesta