Un centenar de ciudadanas marroquíes se concentraron ayer ante la sede de la cooperativa agrícola “Fresón de Palos” para denunciar que se encuentran atrapadas en la provincia de Huelva tras el cierre de la frontera por parte de Marruecos, y exigir así una solución a la situación.
Estas problemática afecta a unas 7.200 trabajadoras marroquíes en toda la provincia contratadas en origen para la campaña de los frutos rojos. Una vez terminada la temporada y ya sin contrato de trabajo, estas no han podido aún regresar a su país, después de que el gobierno marroquí decretara el cierre de fronteras por la crisis del Covid-19.
Las organizaciones agrarias han venido llevando a cabo diversas gestiones ante las autoridades sin obtener ningún resultado positivo a las pretensiones.
Hasta ahora el Gobierno de Marruecos solo ha puesto en marcha un plan de repatriación para los marroquíes con visado de estancia corta en el extranjero, los desplazados por motivos familiares y médicos y los turistas.