Las empresas y agentes andaluces del conocimiento podrán acceder en verano a una línea de ayudas por importe de ocho millones de euros para financiar sus proyectos investigación y de innovación que den respuesta, desde el conocimiento, al problema de la sequía que afecta a Andalucía. El consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, ha explicado durante una jornada sobre ‘Soluciones tecnológicas a la gestión del agua’, organizada por la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), que estos incentivos se articularán mediante una convocatoria pública que se tramitará mediante decreto-ley. «Es necesario buscar soluciones inminentes a esta problemática que va más allá del consumo humano, ya que tiene también un alto impacto económico en sectores productivos claves como la agricultura, la ganadería, el turismo, la industria o el segmento energético, de ahí que se haya optado por esta figura legal», ha destacado.
La convocatoria de incentivos será en régimen de concurrencia competitiva y se nutrirá de financiación europea, a través de Fondos FEDER, que supone el 85% del montante; y de recursos propios, que representan el 15% restante. Para acogerse a este programa, las iniciativas deberán tener un presupuesto mínimo de 250.000 euros y la subvención de la Administración autonómica podrá cubrir desde el 40% hasta el 100% del importe según el tipo de proyecto y entidad solicitante. El plazo de ejecución será de hasta 24 meses. Podrán optar a estas subvenciones empresas, agrupaciones empresariales innovadoras (AEI), organismos públicos de investigación, universidades y centros tecnológicos que investiguen en este campo o que hayan diseñado alguna herramienta tecnológica que ayude a paliar la problemática de la escasez hídrica.
También podrán acogerse a este programa las propuestas y proyectos recopilados en la plataforma ‘PLAnd SEQUÍA Andalucía’, instrumento activado en octubre de 2022 por la Consejería de Universidad en la lucha contra la escasez de agua. Esta actuación surgió con el fin de identificar las posibles soluciones existentes y canalizarlas hacia la Administración pública y al sistema productivo andaluz para dar respuesta a las carencias y deficiencias originadas por esta problemática en la comunidad.
En su intervención, Gómez Villamandos ha remarcado que «esta línea de ayudas posibilitará la materialización de muchas de las alternativas planteadas dando solución así a las necesidades de los principales sectores productivos y de la sociedad en general».
Esta línea de ayudas se está elaborando de acuerdo con las directrices de la Estrategia de Investigación, Desarrollo e Innovación de Andalucía (EIDIA) 2021-2027 y la Estrategia de Especialización Inteligente para la Sostenibilidad de Andalucía, S4 Andalucía.
‘PLAnd SEQUÍA Andalucía’ promueve la transferencia del conocimiento entre los distintos agentes del sistema andaluz del conocimiento y el tejido empresarial y permite ganar en eficacia, rapidez y efectividad en las investigaciones, productos y servicios en los que se trabaja desde los distintos grupos de investigación y desde la esfera empresarial.
Desde su creación, el portal ha registrado 93 proyectos innovadores procedentes de 75 entidades, de las que 59 son andaluzas. Del conjunto de propuestas, el 66,6% (62) están impulsadas por empresas, mientras que el resto han sido promovidas por grupos de investigación y centros de I+D.
Las soluciones contabilizadas se encuadran, en su mayoría, en la categoría de agricultura, pesca, agua y desarrollo rural (84), aunque también ofrecen medidas a las necesidades planteadas en otras áreas como industria, energía y minas; sostenibilidad, medio ambiente y economía azul; emergencias y protección civil; infraestructuras, articulación del territorio y vivienda y la actividad turística, la cultura y el deporte.
Entre las propuestas registradas se encuentran algunas innovaciones que plantean la generación de agua a partir de la propia atmósfera dirigida al consumo humano o a la agricultura, o la utilización de microalgas para tratamiento de aguas residuales. De igual modo, se incluyen otras actuaciones encaminadas al riego inteligente para ahorrar y mejorar la producción o al uso de drones para la detección de fugas de agua en conducciones aéreas. A estos proyectos se suman, asimismo, otros que contemplan tecnologías que evitan el desperdicio de agua fría que se produce cuando el usuario quiere utilizar el agua caliente.
Según el informe de la CE, Europa se enfrenta a la peor sequía de los últimos 500 años. Un déficit hídrico que, en España, según la propia AEMET, entró en 2022 a considerarse como de larga duración, siendo la Cuenca del Guadalquivir una de las más afectadas.
Precisamente la reserva hídrica en Andalucía se encuentra en estos momentos en torno al 27% de su capacidad.