Un año más la Hermandad del Rocío de Bonares regresa a la localidad, tras seis días de fe y devoción a la Blanca Paloma.
De esta manera, finaliza en Bonares una romería soñada en la que se cumplen 90 años de la fundación de la Hermandad.
Como ya es tradición, en el paraje natural ‘El Corchito’ la Hermandad hace una parada junto a pequeños bonariegos, que con sus familias los espera con ‘la rosca y el huevo’, algo muy típico del municipio.
De esta manera concluye esta romería, siendo ya 90 los años que llevan peregrinando a los pies de la Virgen del Rocío. Ahora, solo queda descansar y comenzar la cuenta atrás para un nuevo Pentecostés.