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Las fiestas patronales pudieron disfrutarse a lo largo y ancho de la comarca. En su mayoría advocaciones marianas, con alguna excepción como la de San Roque en Manzanilla, se celebraron principalmente el día 15 o en la madrugada del 16 como en el caso de La Palma del Condado.
En Villarrasa, la Virgen de los Remedios comenzó su salida procesional pasadas las nueve y media de la noche, tras concluir los cultos preparatorios que se han estado celebrando en las últimas semanas.
La patrona de los villarraseros estuvo acompañada por la banda de música de la Cruz Roja de Sevilla y en su itinerario visitó las distintas ermitas y capillas que hay erigidas en la localidad. Tras la celebración de los actos religiosos, la localidad espera con ansia el comienzo de su feria el próximo miércoles.
En La Palma del Condado, por su parte, hubo de esperar hasta la una de la madrugada, ya del día 16 para disfrutar de la tradicional procesión de la Virgen del Valle, conocido como Rosario de doce.
La virgen, ataviada con el manto de tisú que en 2015 cumplirá 50 años y que fue regalado por el pueblo de La Palma, procesionó entre los aromas de los nardos, flor que predomina en su exorno, acompañada por los acordes de los campanilleros de la localidad y de la banda de música Virgen de las Mercedes de Bollullos. Se trata de una procesión sin cortejo en el que todo el pueblo acompaña a la virgen en su recorrido nocturno por las calles de la localidad.
También Manzanilla celebró sus fiestas patronales, pero en este caso en honor a San Roque del que se conmemora este año el 75 aniversario de su llegada a la localidad. Por ello, el pasado jueves, el Ayuntamiento hizo entrega al santo patrón del bastón de alcalde que lucía ya en su paso procesional en su salida del día 16 cuando se celebra el día de su onomástica.
